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Agustín Ramírez Agundis*
Miércoles 16 de noviembre de 2022
Es una calle larga y silenciosa / Ando en tinieblas y tropiezo y caigo / y me levanto y piso con pies ciegos / las piedras mudas y las hojas secas / y alguien detrás de mí también las pisa: / si me detengo, se detiene; / si corro, corre. Vuelvo el rostro: nadie.
Todo está oscuro y sin salida, / y doy vueltas y vueltas en esquinas / que dan siempre a la calle / donde nadie me espera ni me sigue, / donde yo sigo a un hombre que tropieza / y se levanta y dice al verme: nadie.
– Octavio Paz, La calle
Por estas fechas flotan en el ambiente varios temas acerca de los cuales es interesante comentar. Son tres los que más me llaman la atención. Uno de ellos tiene un alcance global por las implicaciones que está teniendo para todos los pueblos del planeta; es el asunto de la guerra, «las guerras debiéramos precisar», específicamente esa que en el transcurso de este 2022 ha provocado en mayor medida graves problemas para la población mundial y que en este momento representa un severo riesgo de escalar hasta convertirse literalmente en una gran hecatombe; al respecto viene a la mente esta frase atribuida a Albert Einstein: “Si hay una Tercera Guerra Mundial, la cuarta será a garrotazos”.
Un segundo tema tiene que ver con el gobierno del estado de Guanajuato, concretamente con la persona que lo encabeza, quien se la pasa nadando de a muertito para evadir los graves problemas que aquejan a la gente, es decir, la situación social y de manera destacada el de la inseguridad. En los dos últimos años sus discursos se centran en un plan que, según él, es fundamental para el desarrollo de la entidad durante los próximos treinta años. Mentefactura es la palabreja con la que se llena la boca en las contadas ocasiones en que se dirige no al pueblo de Guanajuato sino a las cúpulas del sector empresarial quienes son, finalmente, a los que sirve. Mentefactura, concepto que, es fácil darse cuenta, no comprende o, en el mejor de los casos, mal comprende, por su angosta formación de tecnócrata completamente alejado del humanismo. Mentefactura, ecosistema, valle de la mentefactura, epicentro de la industria 4.0 son las palabras y frases que atropelladamente avienta sin darse cuenta que los demás nos damos cuenta de que ni idea tiene del asunto.
El tercer tema tiene que ver con la evolución que ha tenido el problema de la inseguridad en el país y, sobre todo, la manera como la gente manifiesta, a través de su actuar, la percepción que tiene al respecto.
En este último asunto se enfoca este artículo, en los próximos intentaré abordar los otros dos.
Hace unos cuantos días, al momento de estar platicando con mi vecino de la casa de al lado, se escuchó una serie de detonaciones. Evidentemente, éstas provenían de los cuetes que los pobladores de la colonia aledaña lanzaban con motivo de las festividades de San Judas Tadeo. Se lo comenté y él, medio en tono de broma, medio en serio, me dijo que se trataba de disparos con armas de fuego, insinuándome que por la violencia que vive el país, éste se equiparaba con el de Ucrania. Como respuesta, simplemente le aclaré la notoria diferencia entre el sonido que se produce al lanzar un cuete y el que provoca un disparo de bala, agregando que nada tiene que ver la situación de México con la de un país en guerra, como es el caso de Ucrania. Lo primero lo aceptó, lo segundo no, para él así de grave es la violencia en México.
Sus razones tendrá mi vecino para tener esa percepción de la inseguridad en el país y, quizás, más concretamente en Guanajuato y en particular Celaya, la ciudad donde vivimos. Según mi modo de ver las cosas, algunos sectores de la población se encierran en un círculo vicioso que los lleva a un estado permanente de temor. Entre más se encierran y se alejan las personas de la calle y de la gente, menos conocen y viven la situación real y, por lo tanto, más propensos están a creer la información catastrófica que desmedidamente difunden los medios tradicionales sobre los hechos de violencia que ocurren en el país.
Es muy aconsejable romper ese círculo vicioso de temor➭encierro y aislamiento➭alejamiento de la realidad➭creer información catastrófica➭más temor.
En los días recientes, con motivos diversos, se han suscitado reuniones masivas que ponen de manifiesto que la gente, de manera significativa, ha decidido volver a tomar las calles, superando tanto el temor ante lo que queda del Covid-19 como ante los hechos de inseguridad que han ido a la baja en la mayoría de las regiones del país.
El 25 de septiembre, en la Plaza de la Constitución de la Ciudad de México, se presentó el grupo Firme, con una asistencia que se estimó en alrededor de 280 mil personas, las que abarrotaron el Zócalo y las calles aledañas para disfrutar el concierto durante más de dos horas de manera festiva y sin incidentes mayores.
Durante octubre se llevó a cabo la llamada liguilla del futbol. En la mayoría de los 14 partidos, los estadios «ubicados en seis entidades del país» se llenaron a su máximo aforo, dándose el caso de la asistencia de casi 81 mil aficionados el sábado 22 para presenciar en el Estadio Azteca el juego entre el América y el Toluca, sin que en ninguno de ellos se hayan reportado problemas de violencia o inseguridad.
Entre el viernes 28 y el domingo 30, los fanáticos al automovilismo de la Fórmula Uno se dieron cita en el autódromo de la Ciudad de México, estimándose que de manera acumulada en los tres días el escenario contó con la presencia de 450 mil asistentes. En un solo día, el martes previo, 140 mil personas acudieron a la zona de la fuente La Minerva para convivir en el llamado Checo Pérez Show Run, esto en Guadalajara, ciudad de la que es originario el conductor mexicano, convertido en animador central de las empresas publicitarias en México.
En la ciudad de Guanajuato, entre el 12 y el 30 de octubre se realizó el 50 Festival Cervantino. De acuerdo con declaraciones de la secretaría del ayuntamiento del municipio, se estimaron en más de 300 mil los asistentes y sólo 18 personas fueron puestas a disposición de las autoridades, disminuyendo en casi 30% la cantidad de detenciones respecto a la edición del 2021.
Aquí más cerquita, en la comunidad de La Concepción, municipio de Celaya, el 28 de octubre decenas de miles de personas se dieron cita para el festejo de San Judas Tadeo, apóstol de Jesucristo que es considerado por los católicos como el patrono de las causas difíciles y desesperadas. Ese día, por la tarde, transité por aquéllos rumbos, literalmente un río de gente; familias completas caminaban hacia el lugar por el costado de la carretera que conduce de Celaya a San Miguel. El tráfico vehicular prácticamente colapsado por el cuello de botella que se produce en los alrededores de la capilla, literalmente a un lado de la cinta asfáltica. Al aproximarse al lugar no faltaban, como es la costumbre, los puestos de abastecimiento de agua y ya en el sitio los de comida que gratuita y generosamente ofrecen personas que año con año asumen voluntariamente tal tarea. Así que: llegar, santiguarse frente a la capilla, pronunciar una plegaria, disfrutar la comida y vuelta atrás, pero ya en camión o en el vehículo de algún familiar estacionado por allí estratégicamente para evadir el congestionamiento. No son pocas las personas que realizan la caminata llevando consigo su imagen de San Juditas, la que a veces tiene dimensiones considerables.
Más recientemente, en los primeros dos días del mes de noviembre, en todo el país la gente tomó las calles para llevar a cabo las actividades propias de la tradición del Día de Todos Santos y el Día de Muertos. Guanajuato, con tal motivo, recibió a decenas de miles de turistas. Sólo en San Miguel de Allende, las autoridades registraron la participación de 40 mil personas en los eventos, con una derrama económica de 400 millones de pesos. Todo ello, igual, con saldo blanco.
La concentración de personas en acontecimientos como los citados es en sí un hecho que manifiesta que en México la gente está en el camino hacia la búsqueda y recuperación de la tranquilidad perdida ante los hechos criminales. Revertir los efectos de los crímenes de alto impacto no es nada fácil, sobre todo cuando se han presenciado o se tiene conocimiento de ellos de manera cercana. Sin embargo, la tendencia va por ese rumbo, de ello da cuenta el siguiente gráfico derivado de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana que el INEGI levanta trimestralmente [1]. Entre otros muchos datos, la encuesta incluye los correspondientes a la percepción de la inseguridad de la población en diversos lugares de uso común, tanto a nivel del país en su totalidad como de algunas ciudades. En la gráfica se muestran los cambios en tal parámetro entre julio y septiembre de este 2022.
El trauma que nos han provocado los continuos actos de violencia será difícil de superar. Sin embargo, abandonar la calle significa dejarles el campo libre a quienes los cometen. Por eso, allí vamos, a recuperando nuestras calles, nuestras plazas, nuestros parques, nuestras escuelas, nuestros centros de recreación y diversión. Felizmente, los mexicanos somos un pueblo «muchos pueblos» que lleva en el alma un intenso gusto por la fiesta, la convivencia y el disfrute de sus tradiciones.
Nota:
[1] INEGI. Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, Tercer trimestre de 2022, Principales resultados.
www.inegi.org.mx/contenidos/programas/ensu/doc/ensu2022_septiembre_presentacion_ejecutiva.pdf
* Esta es una colaboración del Colectivo Miguel Hidalgo de Celaya, Guanajuato, al que pertenece el autor.
Foto de portada: Jorge Gardner (@gardnerjorge) / Unsplash.
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