SOMOSMASS99
ÚLTIMO PISO
Gwenn-Aëlle Folange Téry*
Lunes 7 de noviembre de 2022
¿Tú también estás harto de las publicaciones en redes que rezan con palabras de otros? ¿Estilo memes y frases filosóficas? ¿Atribuidas éstas además a personas que ni al caso?
¿Saint-Ex hablando de tráfico? ¿Picasso de cocina?
Me gustaría leer opiniones y aventuras personales, no recibir clases del “vivir mejor” no solicitadas.
La lección de filosofía que más me purga, onda voy al baño por diarrea y vómito, es el cuentito aquel del gusano y de la mariposa.
¿Sí lo ubicas?
No te preocupes, no te sientas mal, pobre gusanito, con mucho trabajo y paciencia, mariposa te volverás.
Para empezar, siempre hay como un dejo de asco hacia el gusano. Nos imaginamos[2] a un gusano feo, maloliente, su manera de moverse nos parece más rastrera que la de las serpientes, vemos en nuestra mente al gusano blanco, deforme por sus anillos gordos y viscosos, lo sean o no. Imaginamos cosas verdes y peludas comiéndose las hojas de la enredadera y pensamos en plaguicidas.
Nadie piensa en el sencillo gusano que abre caminos por la tierra permitiendo a la humedad circular, al aire penetrar, y cagando, vilmente, contribuyendo así al germinar de tanta semilla. Nadie recuerda que muchos gusanos tienen patitas que se articulan y mueven de manera coordinada, no mecánica, natural. Admiramos las luciérnagas pero ignoramos a los gusanos luminosos, es más no sabemos ni dónde viven.
Luego… Luego es lo peor. Esta lección insinúa que el ser gusano es algo indeseable, malo, feo, que la meta es transformarse. No se habla de volverse un gusano más grande, o fuerte o qué sé, yo, uno de esos que tiene 12 corazones o, siendo alarmantemente sencilla, el mejor gusano que puedas ser para el día que vives. No, el tema es la fealdad de esos animales, mejor dicho, bichos, no llegan en nuestra mente a la dignidad de la animalidad.
¿Qué de malo tiene ser gusano? ¿A ver, dame un argumento válido?
¿Lo de comer hojas? Pues yo me como las manzanas enteras, ¿no?
¿El ser, a veces, plaga? Bueno, el ser humano no se queda atrás, ¿verdad?
¿Que algunos son ponzoñosos? Pss, también yo, ya lo has comprobado.
Y ya si hablamos de la meta de la vida de un gusano, pues no, no es transformarse en mariposa.
Para empezar, muchos gusanos[3] no se transforman jamás en mariposas: unos viven toda su vida como gusanos, ya sea porque se los traga algún pájaro astuto, o porque los rayos del sol los tateman por la tarde, y otros, muchos, porque está en su naturaleza, serán moscas, o gusanos y ya, a mucha honra caray.
Y luego las mariposas[4]. Si imaginas una mariposa, te apuesto mi cena de hoy a que la ves hermosa, de los colores que te gustan, volando ligera o posada sobre alguna flor, grande, libre y fuerte.
Claro que no piensas en su cuerpo, velludo y color caca seca, no imaginas el desove, aquello te haría regresar a los gusanos, a fluidos desagradables y no, lo de los gusanos quedó atrás, si ya somos mariposas, ¡wey! Se te olvida que las polillas, plaga por excelencia, son mariposas y le tienes miedo a las grandes, negras, nocturnas.
Sí, te concedo que si me das a escoger, prefiero ser mariposa que gusano, sí, son más atractivas, sí. Y sí, ayudan en el crecimiento de la naturaleza, onda soy abeja y polinizo.
Pero son iguales que los gusanos: existen. Y no son ni buenas ni malas, sólo son. Igual que los gusanos, orugas, lombrices, larvas. Sólo eso, son.
Claro, la maravilla de la transformación, el pasar de gusano a mariposa. La verdad no he estado dentro de un capullo, pero la lógica me dicta que sin gusano no hay ni capullo, ni crisálida ni resultado mágico. Mariposa sin gusano no se da.
Tons, ¿por qué ese afán de decir que somos gusanos que aspiramos a ser mariposas? ¿Que ser gusano es malo, muy malo, y ser mariposa es bueno, muy bueno? ¿Que estamos, además, en un grupo o en el otro? ¿Que no hay de otra?
Y aquí, parafraseo a Saint-Ex[5]: Yo conozco a un dragón único en el mundo. Es el tiempo que he pasado con él lo que lo hace tan importante para mí. Lo esencial no radica en nuestro mirar, sino en el suyo.”
Ese que conozco nunca fue gusano, ni mariposa, ni tlacuache, ni delfín. Es dragón. De los coloridos, panzoncitos, alas abiertas, listo para volar cuándo lo decida, de los que escupen fuego certero. Cuando camina, puede parecer cómico, sí, pero basta con recordar su actuar y sentires para dejar de reír.
Y sé que se siente a veces como nos hace sentir tanta frase y juicio redsocialero: Gusano-feo que nunca será Mariposa-hermosa.
Este dragón en particular no sabe aún que en la fiereza de su mirar se ve quién es. Y eso no es ni malo, ni bueno, sólo es.
Notas:
[1] De que yo sé quién eres. Y eso no es ni bueno ni malo, sólo es.
[2] Sí, tú también, no te hagas.
[3] Existen más de 20,000 clases de gusanos en nuestro planeta. De Júpiter, todavía no hay cifras.
[4] Además, animal considerado femenino en nuestras mentes tan estrechas. ¿Los hombres no están incluidos en este cuento o cómo?
[5] No, él no escribió esto, sólo lo sugirió con su rosa y su Principito.
Gwenn-Aëlle Folange Téry es pintora y escritora.
Foto de portada: Gwenn-Aëlle Folange Téry.
3 Comentarios
Estoy de acuerdo, tanto “buen consejo” de cómo ser y vivir mejor, en “el presente” y luego pienso en quien los manda y me pregunto: lo habrá leído? Lo practica?
También preferiría leer cómo le fue? Qué le angustia? Qué piensa y siente? Así estaríamos más cerca y sabríamos quiénes somos, o al menos estaríamos más cerca de saberlo. Me parece increíble que si mando algo de lo que escribo acá, en los grupos nadie lo lee, pero sí todos esos consejos de quien sabe quien…
je taime
Moi aussi