SOMOSMASS99
Víctor Ruiz Arrazola / SomosMass99
Oaxaca, Oax. / Lunes 8 de marzo de 2021
- El Fiscal Rubén Vasconcelos Méndez renunció a la mitad de su gestión encomendada por el Congreso estatal
- Organismos internacionales como la ONU y la CIDH han tenido que intervenir ante la impunidad
A pesar de haber sido nombrado por el Congreso del estado de Oaxaca por siete años como Fiscal General (2017-2024), Rubén Vasconcelos Méndez renunció al cargo el 5 de marzo. Dejó una serie de investigaciones pendientes de concluir sobre delitos graves cometidos contra mujeres, como feminicidios, entre otros, según testimonios de víctimas, familiares de víctimas y colectivos prodefensa de derechos humanos.
- Rubén Vasconcelos Méndez, fiscal general de Oaxaca. | Foto: SemMéxico.
Vasconcelos Méndez fue electo por 39 votos a favor, de un total de 42, de las diversas fracciones parlamentarias del Congreso de Oaxaca, al integrar una terna propuesta por el gobernador Alejandro Murat Hinojosa, de acuerdo a lo estipulado por la Constitución Política local.
No obstante el apoyo recibido por los partidos políticos representados en la LXIII Legislatura para su nombramiento, los reclamos por su falta de resultados se dejó ver en las calles y en diferentes foros, incluso internacionales, a los pocos meses de su nombramiento.
Casos emblemáticos como el feminicidio de la fotoperiodista María del Sol Cruz Jarquín o la agresión con ácido en contra de la sarxofonista Elena Ríos, son muestra de que las investigaciones del Ministerio Público no se efectuaron de manera pronta, expedita y de manera científica. Las evidencias recopiladas por la Agencia Estatal de Investigaciones son inconsistentes y con ello se vulneró el derecho de acceso a la justicia de las víctimas, así como de sus familias.
Entre los casos pendientes de justicia de los que tuvo conocimiento la Fiscalía durante el tiempo que estuvo al frente Rubén Vasconcelos Méndez, también se encuentra el feminicidio de Alma Itzel Romero García, de 21 años de edad, originaria de la comunidad de Morelos Itundujia, perteneciente al municipio de Santa Cruz Itundujia, en la región de la Mixteca oaxaqueña, quien concluyó sus estudios de bachillerato en 2017, emigró para trabajar en una maquiladora en la ciudad de Tijuana “con el sueño de algún día poder estudiar la licenciatura en Gastronomía”, recordó su madre Mayra García Cruz.
- María del Sol Cruz Jarquín. | Foto: Twitter.
De acuerdo a la información recabada por el Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas, el día 25 de octubre de 2020 Alma Itzel Romero García llegó a su comunidad de Morelos Itundujia para pasar con su familia la celebración de Todos Santos.
Durante esa estancia, un excompañero del bachillerato la invitó a la celebración del Día de Muertos en la casa de su familia, ubicada en la comunidad de Victoria Itundujia, para lo cual, el día 2 de noviembre, un joven de nombre Arturo Ramírez Peña trasladó a Alma Itzel Romero García a bordo de una motocicleta, llevándola a casa de los padres de su amigo Javier Sánchez.
Por la distancia y por lo accidentado del lugar, Alma Itzel Romero García le mandó mensajes a su mamá para decirle que llegaba al otro día, 3 de noviembre, y desde ese momento no supo más de ella. El día siete de noviembre, aproximadamente a las tres de la tarde, en el paraje conocido como El Pescadillo apareció su cuerpo sin vida. De estos hechos se inició la carpeta de investigación 34180/FMIX/FMUJ-TLAXIACO/2020 en la Fiscalía de Delitos contra la Mujer por razón de Género en la ciudad de Tlaxiaco.
El presidente de Cedhapi, Maurilio Santiago Reyes, declaró que el 2 de octubre de 2019, “aproximadamente a las once de la noche, fueron asesinadas Angélica Martínez López y Carolina González Martínez de 49 y 18 años de edad, respectivamente, en la calle Isabel la Católica s/n. en la población de San Martin Itunyoso, por un grupo de personas armadas que dispararon contra varios miembros de su familia. A pesar que ya hay elementos para fincar responsabilidad a los culpables, la Fiscalía de Delitos contra la Mujer por razón de Género, con sede en la ciudad de Tlaxiaco, quiere archivar la carpeta de investigación número 34329/FMIX/FMUJ-TLAXIACO/2019”
Otra víctima de feminicidio, a quien no se le ha hecho justicia es Yaneth González López, de 34 años de edad, licenciada en Administración de Empresas, egresada del Instituto Tecnológico de Tlaxiaco. Originaria de Llano San Vicente Putla, Oaxaca, se desempeñaba como tesorera de Constancia del Rosario Putla. Madre de dos hijos.
El día lunes 26 de Marzo de 2018, aproximadamente a las 18:50 horas, Yaneth González López llegó a la Unidad Habitacional Pochtlán, en la ciudad de Putla de Guerrero, a bordo de su camioneta blanca Chevrolet Tracker, en compañía de su hijo de nueve años de edad, Al estacionar su vehículo frente a su vivienda, dos hombres de complexión media y rostro desconocido, le dispararon en la cabeza y cuerpo, en diferentes ocasiones, causándole la muerte de forma instantánea, todo esto en la presencia de sus familiares. Se inició la carpeta de investigación 1014/PG/2018 en contra de quien o quienes resulten responsable por el delito de homicidio.
La familia de Yaneth González López ha exigido a las autoridades que se investigue como feminicidio, pero en diversas ocasiones han recibido amenazas y atentados en su contra. Por ello, con fecha 6 de septiembre de 2018, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió Medidas Cautelares (MC-454-18) a favor de familiares de la víctima y solicitó al gobierno mexicano que se investigue y se sancione el feminicidio.
Santiago Reyes dijo que este es el primer caso de feminicidio en Oaxaca, del cual se pronuncia el organismo regional por medio de una Medida Cautelar.
El día 27 de agosto de 2018, aproximadamente a las diez de la noche, en el momento en que Alejandro Fernando Rodríguez Soriano, hijo de Elvira Rodríguez Soriano, llegaba a su domicilio de la colonia La Fundidora, Barrio San Sebastián, Tlaxiaco, se percató que los cuartos de su vivienda estaban abiertos y con sus pertenencias tiradas por todos lados y con las luces prendidas, no así de las luces del exterior. Le gritó a su mamá, pensando que se encontraba en el cuarto donde dormía.
Al no obtener respuesta, se dirigió a la cocina e inmediatamente vio a su madre tirada en el piso. Inmediatamente acudió a apoyarla, tenía un cable amarrado en el cuello y como pudo se lo quitó. Salió a pedir ayuda y llegaron varios vecinos a su domicilio, pero ya sin poder hacer nada. Unos 20 minutos después arribaron paramédicos, quienes constataron que la mujer había muerto.
Estos hechos fueron denunciados, quedando registrados en la carpeta de investigación 2780/FMM/2018, por el delito de feminicidio en contra de quien o quienes resulten responsables, en la Fiscalía de Delitos contra la Mujer por Razón de Género de Tlaxiaco, Oaxaca.
Severina Paz Bautista, originaria de la comunidad indígena mixteca de Santa María Teposlantongo Juxtlahuaca, debido a la pobreza, marginación y falta de oportunidades, de joven emigró a trabajar a la ciudad de Guadalajara, Jalisco, en donde realizó sus estudios de enfermería. Se casó e hizo una familia con David Christian Echeverría Trejo. Este caso también estuvo en manos del equipo de Rubén Vasconcelos Méndez, sin que se hayan concluido las investigaciones.
El día 15 de julio de 2013, Severina Paz Bautista y David Christian Echeverría Trejo, acompañados de sus menores hijos viajaron de la ciudad de Guadalajara a la comunidad de Yosonduu, San Juan Mixtepec Juxtlahuaca, esto con el objeto de visitar a los padres de la mujer. Llegaron a la comunidad de Yosonduu la noche del día 16 de julio.
El día 21 del mismo mes, aproximadamente a las 03:30 horas, en el momento que descansaban escucharon que un vehículo se estacionó frente a la vivienda que ocupaban. Posteriormente se escuchó que pateaban la puerta, todos despertaron y en ese momento se percataron que habían ingresado al domicilio cuatro personas del sexo masculino, vestidas con uniforme de color negro y con pasamontañas en el rostro que portaban armas de fuego largas y cortas. Con violencia sacaron a Severina Paz Bautista y a David Christian Echeverría Trejo y los subieron a una camioneta tipo Suburban, de color blanca con una raya de color negra. Huyeron con dirección al poblado de San Martin Itunyoso, desconociéndose desde ese momento su paradero.
Foto de portada (ilustrativa): Corta Mortaja.
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