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Redacción / SomosMass99
Ciudad de México / Martes 21 de septiembre de 2021
«El gobierno del estado de Guanajuato, a través de su Secretaría de Educación (SEG), se ha sumado a la empresa canadiense Argonaut Gold, en su persistente intento de engaño a las comunidades cercanas al proyecto minero Cerro del Gallo, en Dolores Hidalgo», denunció la organización civil Acción Colectiva.
El 16 de septiembre algunos medios de comunicación informaron que Monserrat Bataller Sala, delegada regional de la SEG y Lourdes Macpherson, gerente de Asuntos Corporativos y Comunicación de Argonaut Gold México, realizaron un evento conjunto para la entrega de mochilas y útiles escolares a las y los alumnos de la telesecundaria 892 de la comunidad de San Antón de las Minas.
Previamente, el 13 de julio, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo se reunió con directivos de la minera Argonaut Gold para darle la bienvenida a sus proyectos en el Estado de Guanajuato, ello pese a que su proyecto aún no cuenta con los permisos necesarios para operar.
La “cara amable” del despojo
En lo que consideró «la cara amable del despojo», Acción Colectivo dijo que entre las estrategias que utilizan las empresas mineras para acercarse a las comunidades está, precisamente, la utilización de programas con cara social, como el denominado Becarios, que promueve Argonaut Gold, con el que la empresa aprovecha «la incapacidad del Estado para garantizar el derecho a la educación» para ofrecer “progreso, desarrollo y mejores oportunidades” a las y los pobladores, aunque en realidad, de llevarse a cabo el proyecto de Cerro del Gallo, sólo una pequeña parte lograría integrarse a la actividad económica como mano de obra barata, mientras el resto observa la destrucción de su vida comunitaria.
«No extraña que, tanto la empresa como el gobierno, usen los ya conocidos estándares no vinculantes de ‘responsabilidad social corporativa’ para hacer creer a la población que la minería es una actividad preponderante, cuando en realidad es todo lo contrario porque, de todas las actividades extractivas que están acabando con el planeta, sin duda, la minería es la que mayores daños genera. Es común que usen este marco de estándares construidos por ellas mismas para disfrazar y esconder el despojo y desplazamiento que ocasionará el extractivismo de ‘cara amable’.
Acusó que las empresas mineras son expertas en lucrar con las necesidades que gobiernos como el de Guanajuato generan a partir de su incapacidad para plantear alternativas ambiental y culturalmente apropiadas, no sólo para las familias más vulnerables, sino para la población en general.
«Las empresas mineras, como Argonaut Gold, pretenden encubrir el peligro que implica la minería ‘de tajo a cielo abierto’ e intentan incidir en la percepción de las madres de familia de las comunidades, quienes por lo regular se hacen cargo de la educación y cuidado de la niñez».
Lamentó que el gobierno de Guanajuato, que debería ser garante de todos los derechos humanos, apoye este sistema que se sustenta en la acumulación por desposesión, respondiendo así a las exigencias del modelo patriarcal, capitalista y colonial tan acentuado en esta región del país.
«No tenemos la menor duda, de llegar a operar el proyecto minero Cerro del Gallo, se generará una catástrofe socioambiental irreversible y sin precedentes en la región, tal cual la hemos visto, vivido y documentado en muchas partes de México y de Latinoamérica. Basta de políticos/as y representantes que sólo ven en las inversiones una salida a sus incapacidades como gobernantes», afirmó.
El proyecto minero de Argonaut Gold, se ubica en el Cerro del Gallo, en Dolores Hidalgo, dentro la Cuenca de la Independencia, un territorio en el que el agua escasea, la sobreexplotación de su acuífero subterráneo es alarmante y el equilibrio hidrológico fue roto hace décadas y, a pesar de ello hay inmensas concesiones de agua acaparadas por grandes empresas del sector agro-exportador, así como del industrial. No es casual que el severo estrés hídrico de la Cuenca nos esté llevando a extraer agua a cerca de 600 metros de profundidad, lo que implica consumir agua de forma directa e indirecta a través de alimentos, enriquecida con varios metales y metaloides entre ellos el fluoruro y el arsénico respectivamente, ambos altamente dañinos para la salud humana.
«Ante esta amenaza, las y los habitantes de las comunidades directamente afectadas, tales como Santa Bárbara, Cerrito de Guadalupe, La Colmena, El Durazno, Palacio de Abajo, Potrero de Guadalupe, San José de la Campana, San José de la Palma, El Llanito, La Ventilla, San Isidro El Sisote y San Marcos, han manifestado en repetidas ocasiones su rechazo tajante a la apertura de la mina Cerro del Gallo, logrando incluso que las y los candidatos a la presidencia de Dolores Hidalgo firmaran, durante la pasada campaña electoral, compromisos de no otorgar permisos de uso de suelo ni de construcción para ningún tipo de mega proyectos extractivos, incluyendo al presidente electo, Adrián Hernández Alejandri», recordó Acción Colectiva.
Imagen de portada: Mural en Dolores Hidalgo, Guanajuato, contra la minera Argonaut Gold. | Foto: Wikimedia Commons.
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