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Redacción / SomosMass99
Ciudad de México / Lunes 15 de octubre de 2018
- Casos como el de Aurora de la Paz Navarro deben ser investigados como crímenes de lesa humanidad, dijeron las organizaciones.
«El asesinato de estudiantes en la Plaza de las Tres Culturas el 2 de octubre de 1968 marca el inicio de un periodo complejo en la historia de México, conocido como Guerra Sucia. A 50 años, vuelve a salir a luz pública la exigencia histórica que ha prevalecido a través de los años en el ideario colectivo, cada vez con mayor fuerza y con la misma exigencia ¡Ni perdón, ni Olvido!», sostuvieron organizaciones defensoras de derechos humanos que anunciaron la presentación de una demanda de amparo por la desaparición forzada en 1976 de Aurora de la Paz Navarro del Campo.
De la Paz Navarro del Campo fue, añadieron, una de las miles de víctimas de este periodo. En febrero de 1976 fue detenida por elementos de la Policía Militar en un operativo de la Dirección Federal de Seguridad en Acapulco, Guerrero, y en el Estado de Hidalgo, y desde entonces se desconoce su paradero. Participó en diferentes movimientos políticos y sociales, entre ellos la Liga Comunista 23 de septiembre y el Partido de los Pobres. Constituyó el Movimiento de Acción Revolucionaria (MAR), que tuvo injerencia en el Estado de Guerrero y fue relacionado con los grupos revolucionarios liderados por Lucio Cabañas y Genaro Vázquez.
Pese a que existen elementos para sostener que su desaparición forzada ocurrió como represalia a sus actividades políticas, y por ende fue víctima de las políticas implementadas por el Estado para acabar con los grupos opositores al gobierno durante ese periodo, a la fecha la Procuraduría General de la República no ha sancionado a ninguna persona por esos hechos.
Las organizaciones recuerdan que la Guerra Sucia es el periodo histórico en que las autoridades del Estado mexicano utilizaron a las instituciones de seguridad para suprimir a la oposición política. Ha sido reconocido como tal por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la extinta Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (FEMOSPP), instituciones que han señalado la existencia de una política contra la oposición al gobierno y a sus simpatizantes, cuyas corporaciones de seguridad se caracterizaron por tener facultades prácticamente ilimitadas.
En su operación, la Guerra Sucia estuvo a cargo de grupos especialmente formados por corporaciones de la seguridad del Estado, encabezadas por la Dirección Federal de Seguridad, con la que «la violencia continuó hasta inicios de la década de los ochenta y se tradujo en acciones armadas, enfrentamientos, con la continuación de los excesos de los organismos antisubversivos y las consecuentes desapariciones forzadas que engrosaron la relación de hechos ilegales».
Ante ello, surge la necesidad de que casos como el presente se investiguen en un contexto de crímenes de lesa humanidad. «Desde la sociedad civil hemos advertido que los mecanismos ordinarios de procuración de justicia no han sido suficientes para garantizar el acceso a la justicia a la víctimas de este periodo y sus familiares, lo que incluso ha puesto en duda la imparcialidad de la investigaciones.
«Ante ello, diversas organizaciones de la sociedad civil hemos impulsado el presente amparo, no sólo para lograr la investigación de la desaparición de Aurora de la Paz, sino para volver a llevar al foro judicial la demanda social de investigar efectivamente los crímenes ocurridos durante el periodo de la Guerra sucia y que sus perpetradores sean castigados».
El amparo presentado el 8 de octubre de 2018, explicaron, busca revindicar a las víctimas de la guerra sucia; evidenciar la falta de un mecanismo de procuración de justicia que de manera objetiva e imparcial investigue lo ocurrido en estos hechos, y finalmente sancionar a los responsables, no sólo a los ejecutores, sino también a aquellos que desde las altas estructuras de poder ordenaron y toleraron estas prácticas que tuvieron como finalidad exterminar a un sector importante de la sociedad mexicana.
Las organizaciones que presentaron el amparo sobre la desaparición de Aurora de la Paz Navarro del Campo son la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de Derechos Humanos, el Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia, I(dh)eas Litigio Estratégico, Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, y Documenta.
Fotograma de portada: YouTube.
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