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The Cradle
Lunes 8 de mayo de 2023
Israel se ha negado a liberar los cuerpos de unos 130 palestinos desde 2015, en lo que los grupos internacionales de derechos humanos llaman «castigo colectivo» de las familias.
La familia del ícono de la resistencia palestina Khader Adnan ha denunciado (este sábado) que las autoridades israelíes se niegan a entregar su cuerpo días después de su muerte y no dirá si tienen la intención de hacerlo.
«Es un castigo colectivo», dijo Hassan Jabareen, director de la organización palestina de derechos humanos Adalah, al New York Times (NYT). «Estos son cuerpos de personas que viven bajo la ocupación israelí», agregó.
Adnan murió el 2 de mayo dentro de una prisión israelí después de una huelga de hambre de 87 días, la primera muerte de este tipo en más de 30 años. Adnan, un destacado miembro y portavoz del grupo de resistencia Yihad Islámica Palestina (PIJ), estaba detenido sin juicio ni cargos.
La negativa de Israel a entregar el cuerpo de Adnan ha llamado la atención sobre esta práctica, que a menudo se utiliza como palanca para obtener los cuerpos de los israelíes en poder de grupos palestinos.
Tel Aviv ha mantenido los cuerpos de unos 130 palestinos desde 2015, algunos enterrados en cementerios pero la mayoría en congeladores, según el centro legal de Jerusalén.
Grupos internacionales de derechos humanos han denunciado esta práctica por parte de las autoridades de ocupación, diciendo que la retención de cuerpos castiga a las familias de los muertos colectivamente y podría violar el derecho internacional.
Según el NYT, el servicio penitenciario de Israel dijo que transfirió el cuerpo al ejército el martes, el día de su muerte, pero un portavoz militar dijo el miércoles que no estaba en su poder, y hasta el viernes, la ubicación del cuerpo seguía siendo desconocida.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) pidió a Israel esta semana que devuelva el cuerpo «para que su familia pueda llorar y organizar un entierro digno de acuerdo con sus costumbres y creencias».
«Queremos al jeque entre nosotros», dijo la esposa de Adnan, refiriéndose a un honorífico religioso dado a su esposo. «Y queremos que sea enterrado junto a su padre como él quiso».
Adnan fue detenido el 5 de febrero e inmediatamente se declaró en huelga de hambre.
En los días previos a su muerte, sufrió graves problemas de salud, incluyendo vómitos frecuentes de sangre, debilidad, pérdida frecuente de conciencia, dificultad para hablar y dolor severo en todo el cuerpo.
Funcionarios de la ONU pidieron recientemente que Israel rinda cuentas por su muerte, calificándola de «un trágico testimonio de la política y las prácticas de detención crueles e inhumanas de Israel, así como del fracaso de la comunidad internacional para responsabilizar a Israel frente a las crueles ilegalidades perpetradas contra los palestinos».
Israel mantiene actualmente a unos 4.900 palestinos en sus cárceles, incluidos 1.016 detenidos administrativos detenidos indefinidamente sin juicio ni cargos.
Las órdenes de detención administrativa se revisan cada seis meses para ver si un detenido puede ser liberado o si la orden será renovada. Este proceso puede durar años o incluso décadas.
Imagen: Palestinos pasan junto a un mural que representa a Khader Adnan en la ciudad de Gaza el 2 de mayo de 2023. | Foto: AFP, vía The Cradle.
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