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Redacción / SomosMass99
Ciudad de México / Jueves 30 de marzo de 2023
La muerte de decenas de migrantes este lunes en Ciudad Juárez, en el límite de México con Estados Unidos, profundiza la crisis en la frontera, saturada desde hace años. El incendio en un centro de detención del Instituto Nacional de Migración (Inami), dependiente del Gobierno federal, ha elevado el horror de las penalidades habituales de la travesía a un nuevo nivel.
Las autoridades contaban el martes por la tarde 38 muertos y decenas de heridos, todos hombres, la peor tragedia que se recuerde en una instalación gubernamental. Las dudas sobre la actuación de sus responsables marcan lo ocurrido. En un vídeo que empezó a circular el martes se ve a guardias del centro dejando a los migrantes encerrados, mientras las llamas y el humo se tragan la imagen.
Apenas hace dos semanas la SCJN había determinado que la detención de migrantes extranjeros por más de 36 horas era inconstitucional. Actualmente, la Ley de Migración establece que una persona migrante de origen extranjero puede permanecer de quince y hasta sesenta días hábiles en estaciones migratorias, sin embargo, los ministros determinaron que esto atenta contra los derechos humanos y violenta la constitución.
Abel Ortega, sobreviviente de la tragedia en la estancia migratoria de Ciudad Juárez, cuanta lo sucedido previo a los hechos funestos. Lo cuenta con las palabras atropelladas por el llanto: “Estábamos pidiendo una moneda, llegó Migración, nos gritaban ‘chinga tu madre’, ‘ya valiste madre’, eran agentes de migración con policías, me dieron un papel (de) expulsado del país, me llevaron engañado diciendo que me iban a dar un permiso de trabajo. Me quitan a mi hermano y me dicen que lo van a llevar a la Ciudad de México y cuando me despierto en la mañana me dicen que mi hermano está muerto, pero cómo muerto, si no estábamos haciendo nada”.
Con información y foto de Educa Oaxaca.
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