SOMOSMASS99
Juan José Martínez Bolaños*
Lunes 2 de julio de 2018
Por fin se llevó a cabo la contienda electoral en nuestro país. Este domingo 1 de julio se escogieron bajo el esquema de elección popular un total de tres mil 416 puestos entre presidentes municipales, diputados y senadores en los diferentes niveles de gobierno, esto además por supuesto de la contienda por la Presidencia de la República. Los ciudadanos salieron a votar cumpliendo con su deber cívico y con la ilusión de que un sistema democrático como el que se presume tenemos en nuestro país, haga valer su decisión. Y repito, ¡ilusión!, sólo ilusión y no certeza, sin seguridad porque aún cuando fuimos testigos de una jornada de elecciones que no dio sorpresas en sus resultados hablando en lo general, sí fuimos testigos también de resultados que dejan un sabor amargo después de esta contienda.
De acuerdo a diferentes noticias que circularon durante el día en diversos medios de comunicación, en diferentes estados de la República, se registraron incidencias que algunos funcionarios categorizaron como acontecimientos aislados. Por ejemplo: en Puebla, se registraron balaceras, sujetos armados robaron a punta de armas las boletas de una casilla en San Aparicio. En Michoacán, un comando armado robó alrededor de tres mil boletas en el municipio de Charo. En Chiapas se detectaron grupos armados con armas blancas patrullando las calles durante la jornada electoral. En Pachuca, los ciudadanos a los que no se les permitió votar en las casillas especiales tomaron con violencia las urnas y las destrozaron. Las casillas especiales fueron un tema, en muchas de ellas las boletas no alcanzaron y donde los ciudadanos si votaron, les tomó hasta tres horas poder hacerlo. La violencia no quedó fuera de estas elecciones. De acuerdo a la consultora Etellekt, 132 políticos fueron asesinados desde que inició este proceso electoral. El partido con más políticos asesinados fue el PRI, después el PRD y por último Morena.
Foto de portada: UdeGTv.
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