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ÚLTIMO PISO
Gwenn-Aëlle Folange Téry*
Lunes 24 de enero de 2022
El deseo es un anhelo del pensamiento hacia el porvenir.
– Simone Weil
Bueno, esta vez sí vengo de buenas y esta vez sí, vamos a empezar el 2022 con el pie derecho.
Te platico que trabajo a distancia con unos chicos de quinto y de tercero de primaria: Axel, Christopher, Noel y Uzziel. Oficialmente trabajamos las matemáticas, pero la verdad a mí no se me dan mucho y he preferido irme por caminos alternos, algo así como Uzziel que se adelanta en el bosque cuando va a leñar con su hermano y sus primos: parece que es diferente lo que hacemos, pero todos llegamos al mismo lugar.
Axel y Uzziel son hermanos, con ellos trabajo por teléfono, y a veces es complicado porque tienen la misma voz y no sé quién le atinó al número de palabras en una frase. Uzziel no estaba con nosotros el año pasado pero descubrí que dibuja muy bien y, aunque esté en tercero, la verdad es que es una bala para los números. Voy variando ejercicios y preguntas para que él pueda participar sin que los demás se retrasen. Axel dibuja también muy bien y en matemáticas no hay quien lo pare. Está, se supone, trabajando más la lectura. Por el teléfono oigo seguido sus risas, entremezcladas con la voz del gallo y es divino. Ellos casi no tienen internet, hay nubes, viento y lluvia casi diario en su casita, que está cerca de un río, por eso yo les marco. Este año, Axel sacó el muñeco de la rosca de Reyes de su salón y entonces su mamá va a hacer tamales [1] para unos 40 niños.
Noel tiene mucha suerte, su tía tiene internet en casa, así que él baja de dónde vive, – el pueblo está como recostado en la loma de una montaña, así como perrito dormido-, y puede estar en línea todo el tiempo que quiera. Claro que aprovecha para poner caras y distraerme con sus preguntas y chistes, a veces se complica un poco detenerlo en sus fantasías. Él es muy bueno observando detalles, tiene excelente memoria y una cultura impactante para su edad, sabe tanto de mares y animales como de los Anime. A veces se lleva el celular por la casa y me muestra los alrededores, conozco un poco su pueblo gracias a él.
Christopher estuvo ausente, acaba de regresar. Es muy difícil desde su casa conectarse a internet, o tener celular. Él es más tranquilo que los demás, se toma su tiempo para contestar, no porque no sepa, sino porque tiene una manera diferente de pasear por su cerebro. A veces es muy tímido, creo que le da nervio equivocarse y mi trabajo es convencerlo de su brillantez. Basta con oírlo encontrar los resultados de las tablas de multiplicar en desorden para darse cuenta y sabe usar una hoja entera al dibujar, lo cual no se le da a cualquiera. Cuida a veces a sus hermanitos y lo hace bien, me consta.
Hoy han decidido, medio incitados por mí, compartir sus deseos para el año y la vida con el mundo entero. Se vieron muy tranquilos, les dije que podían desear que a tal o a cual se le pudriera algo pero no lo hicieron, nada más les dio risa. Transcribo sus palabras, sin modificar más que la ortografía.
“Amigo mío, te deseo un feliz año nuevo y que la pases feliz con tu familia.” Uzziel, 8 años, casi 9.
“Te deseo que todos los años estés con tu familia y estés sano y que con tu familia pases tus cumpleaños y que te la pases de maravilla y que cuando soples tus velas todos tus deseos se cumplan por toda tu vida.” Axel, 10 años
“Que Dios te bendiga, que este año, pases muy bonito estas fiestas con tu familia. Que te la pases todos los días muy bonito.” Noel, 10 años
Deseo para los que trabajo con ellos que cuando cumplan años se la pasen felices y les deseo un feliz San Valentín”. Christopher, 10 años
Desearon también, así sin escribir, que el primito de Uzziel y de Axel tuviera un carrito de metal chico para jugar, y que a Noel le llevaran aguacates para su guacamole, eso porque Uzziel acababa de acompañar a su abuela a vender aguacates, se dan mucho en su terreno, eso y rábanos. [2]
Y yo les deseo a mis niños casi lo mismo, familia, amigos, cumpleaños, carritos de juguete. Pero también que algún pudiente o político se dé cuenta de que no, no hay internet por todos lados, y que se dé una vuelta por allá por El Palmar [3] e instale las cosas como deben de ser instaladas para que funcionen bien y siempre.
Quién quita y uno de ellos lee los deseos que comparten los chicos, lee lo magníficos que son y se da cuenta de que depende de todos nosotros el que salgan adelante.
Feliz año nuevo 2022 todo el año y todos los días, con cada vela de cada pastel.
Notas:
[1] Los chicos saben perfectamente cómo se hacen los tamales, allá usan hoja de chilalaca para envolverlos. Coincidimos todos que los menos sabrosos son los de dulce, siempre les falta sabor.
[2] Bueno, dice Noel que mejor quiere rábanos.
[3] Estado de Puebla, colindando con el Estado de Veracruz, Se llama así porque tiene palmas, dos. Me dicen que sacan coyoles y que son ricos, aunque no tanto tanto tanto. Son dulces y se comen crudos o cocidos en miel de piloncillo.
* Gwenn-Aëlle Folange Téry es pintora y escritora.
Fotos:
[1] Uzziel.
[2] Noel.
2 Comentarios
Pues me encantan Axel, Christofer, Noel y Uziel. Si es posible diles que los mando saludar, que me encantan sus deseos y deseo que se les cumplan!
Se los digo
Gracias!