SOMOSMASS99
Caitlin Johnstone*
Viernes 17 de noviembre de 2023
¿Sabías que desde que Estados Unidos llevó su «guerra contra el terror» a África, los ataques terroristas en ese continente han aumentado en un 75.000 por ciento?
Una de las muchas, muchas cosas que apesta de todo esto es saber que cuando haya una represalia violenta por las acciones de Israel en Gaza que maten a civiles israelíes, Israel mirará hacia arriba con inocencia de ojos de Bambi y dirá: «¿Qué les hicimos? ¡Solo queremos vivir en paz!».
Y toda la prensa occidental amplificará el mismo mensaje. Una vez más, lo enmarcarán como un ataque «no provocado» y dirán que «no hay justificación» para lo que se hizo, enmarcarán cada conversación como si la historia comenzara el día de ese ataque, y exigirán que todos los que quieran decir algo crítico de Israel primero prologuen esa crítica con una condena suficientemente contundente de un pequeño grupo de militantes en el otro lado del mundo que no tienen nada que ver con la persona que sí lo es.
Cuando ocurra este acto de violencia (y así será), los que están detrás de él habrán visto a Israel asesinar a miles de niños en Gaza en 2023. Tal vez sean los huérfanos de los padres asesinados en la masacre. Tal vez hayan visto a su hermana destrozada por explosivos militares, la cabeza de su hermano partida por la mitad, a sus vecinos aplastados por un edificio bombardeado, los cuerpos de su familia quemados hasta convertirlos en esqueletos ennegrecidos. O tal vez ellos, como el resto de nosotros, simplemente habrán visto cómo se desarrollaba todo en pantallas electrónicas.
En cualquier caso, las circunstancias de finales de 2023, que plantaron las semillas de la venganza que necesariamente veremos brotar algún tiempo después, no serán mencionadas por los creadores de narrativas autorizados del mundo occidental. El hecho de que la violencia no sea más que el regreso a casa de las gallinas de Israel se borrará de la historia.
Otra vez.
If you want to see how successful the strategy of bombing terrorism out of existence is in practice, look at the US «war on terror,» still going strong 22 years later. In Africa, terrorism’s gone up 75,000% (!) since the US started «fighting terror» there.https://t.co/1TZyrpjEBw
— Branko Marcetic (@BMarchetich) November 16, 2023
¿Sabías que desde que Estados Unidos llevó su «guerra contra el terror» a África, los ataques terroristas en ese continente han aumentado en un 75.000 por ciento? Así es: 75, luego tres ceros, por ciento. Aprendí esta pequeña estadística de un nuevo artículo del periodista Nick Turse, quien también señala que «según el Pentágono, los ataques terroristas solo en la región del Sahel han resultado en 9.818 muertes, un aumento de 42.500%».
Durante muchos años, la gente ha estado documentando la forma en que los intentos de eliminar el terrorismo con bombas en realidad crean más terrorismo. En 2010, el profesor Robert A. Pape escribió un artículo para Foreign Policy titulado «It’s the Occupation, Stupid» (Es la ocupación, estúpido) sobre su estudio con la Universidad de Chicago, que descubrió que los atentados suicidas no son el resultado del fundamentalismo islámico sino de ocupaciones militares extranjeras.
Algunos extractos notables:
- «Más del 95 por ciento de todos los ataques suicidas son en respuesta a la ocupación extranjera».
- «A medida que Estados Unidos ha ocupado Afganistán e Irak, que tienen una población combinada de unos 60 millones, el total de ataques suicidas en todo el mundo ha aumentado drásticamente, de unos 300 entre 1980 y 2003, a 1.800 entre 2004 y 2009».
- «Más del 90 por ciento de los ataques suicidas en todo el mundo son ahora antiestadounidenses».
- «Cada mes hay más terroristas suicidas tratando de matar a estadounidenses y sus aliados en Afganistán, Irak y otros países musulmanes que en todos los años anteriores a 2001 combinados. De 1980 a 2003, hubo 343 ataques suicidas en todo el mundo, y a lo sumo el 10 por ciento fueron de inspiración antiestadounidense. Desde 2004 ha habido más de 2.000, más del 91 por ciento contra las fuerzas estadounidenses y aliadas en Afganistán, Irak y otros países».
Step 1: Destroy nations and displace tens of millions of people.
Step 2: Wait for some of those people to hate you and want to fight back.
Step 3: Use their desire to fight back as justification to repeat Step 1. https://t.co/XVRyEVToZy— Caitlin Johnstone (@caitoz) September 9, 2020
El periodista Jonathan Marshall escribió lo siguiente en 2017:
El nuevo estudio más autorizado sobre las fuentes del terrorismo y la insurgencia en el continente, Journey to Extremism in Africa (septiembre de 2017), concluye que lo que hace que muchas personas se unan a grupos violentos son los incidentes de violencia patrocinada por el gobierno, como «el asesinato de un familiar o amigo» o el «arresto de un familiar o amigo».
«Estos hallazgos ponen de relieve la cuestión de cómo se comportan los gobiernos en sus funciones antiterroristas y de seguridad más amplias en entornos de riesgo con respecto a los derechos humanos y el debido proceso», concluye el informe, basado en entrevistas con más de 500 ex miembros de organizaciones militantes.
«La conducta de los agentes de seguridad del Estado se revela como un destacado acelerador del reclutamiento, y no a la inversa… Estas conclusiones sugieren que se requiere urgentemente una drástica reevaluación de las intervenciones centradas en la seguridad del Estado»
Muchos otros expertos han sacado conclusiones similares de las zonas de conflicto en Oriente Medio y Asia. En 2008, un informe de la Corporación RAND sobre Lecciones para contrarrestar a Al Qaeda advirtió a las fuerzas armadas estadounidenses que «se resistieran a ser arrastradas a operaciones de combate en sociedades musulmanas, ya que es probable que su presencia aumente el reclutamiento de terroristas… La fuerza militar suele tener el efecto contrario al que se pretende: a menudo se utiliza en exceso, aliena a la población local por su naturaleza de mano dura y proporciona una ventana de oportunidad para el reclutamiento de grupos terroristas».
De manera similar, el Grupo de Trabajo Stimson sobre la Política de Aviones No Tripulados de Estados Unidos, compuesto por ex altos funcionarios de la CIA, el Departamento de Defensa y el Departamento de Estado, advirtió en 2014 que los ataques estadounidenses habían fortalecido a los grupos islámicos radicales en el Medio Oriente, África y el sur de Asia.
En otras palabras, no hay mejor manera de hacer que la gente quiera atacarte de cualquier manera que bombardear sus vecindarios, matar y desplazar a sus seres queridos y dominarlos con una ocupación militar opresiva. Todo lo cual Israel ha estado haciendo a los palestinos durante generaciones.
The context behind the war in Gaza
Mnar Adley examines the background to the current war. pic.twitter.com/Xnx96VIQIw
— MintPress News (@MintPressNews) October 13, 2023
El 7 de octubre fue una respuesta a décadas de opresión y abuso por parte del régimen israelí. Israel creó esa violencia, de la misma manera que creó la violencia que con absoluta certeza se le presentará en represalia por sus acciones hoy en Gaza. Los creadores de la narrativa oficial siempre tratan de reiniciar la historia en el momento del último acto de violencia de los palestinos, porque sólo enmarcando esa violencia como no provocada pueden legitimar la idea de que es posible bombardear a una población para que se someta y obedezca.
Pero, por supuesto, no es posible bombardear a una población para que se someta y obedezca. Cada atrocidad que les inflijan solo aumentará su deseo de venganza, un deseo con el que los israelíes deberían simpatizar, ya que los ha consumido y los ha convertido en porristas enloquecidos del genocidio desde el 7 de octubre. Pero su deseo de venganza solo es posible gracias a la falsa narrativa dominante de que el ataque vino de la nada, completamente sin provocación.
El verdadero crimen por el que se castiga a los palestinos es negarse a someterse. Eso es todo lo que ha sido este conflicto, desde el principio. Los palestinos se negaron a aceptar ser expulsados de su tierra y asesinados y desplazados por la fuerza con la creación del Estado israelí en 1948, y esa negativa les ha llevado a sufrir tremendas cantidades de violencia y opresión año tras año y década tras década, bajo la premisa de que es posible bombardear y tiranizar a una población para que obedezca.
Nada te radicalizará más rápido hacia la violencia que ver a tus vecinos y seres queridos destrozados por explosivos militares suministrados por un imperio mundial. Nada garantizará una mayor resistencia violenta que asesinar a miles de niños palestinos a la vista de todos. Esto significa que nada salvo la restitución, las reparaciones y la devolución de tierras a los palestinos pondrá fin a esta pesadilla de una vez por todas.
* Mi trabajo está totalmente financiado por los lectores, así que si te ha gustado este artículo, si quieres aquí tienes algunas opciones para echar algo de dinero en mi bote de las propinas. Todas las obras son coautoría con mi marido Tim Foley.
Imagen de portada: Jeremy Corbyn. | Foto: Caitlin Johnstone Web.
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