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Kit Klarenberg / La Intifada Electrónica
Jueves 30 de junio de 2022
La decisión sigue a numerosas protestas contra Elbit y Jones Lang LaSalle (JLL), el agente de alquiler de esas oficinas.
Es la segunda vez que Palestine Action, el grupo que organiza las protestas, obliga a Elbit a abandonar un sitio en Gran Bretaña, un país identificado por la firma como una prioridad para las ventas y la inversión.
A principios de este año, Elbit confirmó que había vendido Ferranti, su subsidiaria con sede en Oldham, cerca de Manchester.
Las protestas de Palestine Action, que a menudo implican el destrucción de instalaciones de armas, han enfurecido a Israel y sus partidarios.
Uno de los patrocinadores más influyentes de Israel en Gran Bretaña es Priti Patel, la secretaria del Interior.
Ella ha declarado efectivamente la guerra a los activistas de solidaridad palestinos al afirmar que el movimiento de boicot, desinversión y sanciones es racista, sin presentar ninguna evidencia.
Patel ha propuesto una nueva legislación que apunta al tipo de protestas que Palestine Action ha emprendido.
El proyecto de ley de seguridad nacional, como se llama la legislación, otorga a la policía poderes para designar como «lugares prohibidos» áreas donde se encuentra una «aeronave, o una parte de una aeronave, utilizada con fines militares» o «equipo relacionado con dicha aeronave».
Poca oposición
Tras la venta de su planta en Oldham y el cierre de sus oficinas en Londres, Elbit ahora opera desde ocho sitios en Gran Bretaña.
Las plantas propiedad de Elbit, que fabrican motores para drones, entre otros componentes, podrían recibir un estado protegido una vez que la legislación entre en vigor.
Presentado al Parlamento británico en mayo, el proyecto de ley ha encontrado hasta ahora poca oposición.
El objetivo declarado del proyecto de ley es reemplazar «las leyes de contraespionaje existentes con un marco integral para contrarrestar la actividad estatal hostil».
El enfoque que se está adoptando es tan «integral» que es cuestionable si el proyecto de ley se centra realmente en el espionaje en el sentido convencional de ese término. Muchas de sus disposiciones podrían usarse contra la gente común que busca interrumpir el negocio de las armas.
El proyecto de ley permite la cadena perpetua para cualquier persona que obtenga o divulgue «información protegida» y se comporte de una manera considerada «perjudicial para la seguridad o los intereses del Reino Unido».
Elbit se describe a sí mismo como un «proveedor establecido de las Fuerzas Armadas del Reino Unido» y recientemente se le otorgó un contrato para entregar drones de vigilancia al Ejército Británico.
Sabotaje
Una sección sobre «sabotaje» en el proyecto de ley es muy relevante para Palestine Action.
El «sabotaje» se define como «conducta que resulta en daños a cualquier activo», particularmente si el propósito de esa actividad «es perjudicial para la seguridad o los intereses del Reino Unido».
Palestine Action está abiertamente comprometida a dañar y destruir los activos de Elbit en Gran Bretaña.
Si bien muchas personas han sido arrestadas por irrumpir en las plantas de Elbit en Gran Bretaña, casi todas han sido absueltas cuando los casos han ido a los tribunales.
El único enjuiciamiento exitoso fue contra un activista, que fue condenado por desfigurar un sitio de JLL en la ciudad inglesa de Brighton.
La sentencia dictada en ese caso fue una multa de menos de 30 dólares y una libertad condicional de tres meses.
Bajo una libertad condicional, alguien condenado por un «delito» es liberado con el «delito» registrado en sus antecedentes penales. No se toman más medidas si no se comete ninguna otra «ofensa» dentro de un período establecido.
Elbit ha mostrado una renuencia a presentar cargos contra los manifestantes, sin duda porque la compañía teme que se presenten pruebas sobre el uso de sus armas en ataques contra palestinos en los tribunales.
El nuevo proyecto de ley podría proteger a Elbit y otros fabricantes de armas del escrutinio.
Por ejemplo, los tribunales podrían «excluir al público de los procedimientos» si hacerlo se considera «necesario en interés de la seguridad nacional».
Un activista de Acción Palestina argumentó que el gobierno británico está «corriendo asustado de la efectividad de la acción directa desplegada contra Elbit».
«Si este proyecto de ley se construye a medida para aumentar las consecuencias de tomar medidas contra Elbit, como parece ser, expone claramente la alianza entre Gran Bretaña y el régimen de apartheid de Israel», agregó el activista, que habló bajo condición de anonimato.
«No importa qué esfuerzos hagan para detener nuestra campaña, no nos moverán. Mientras el gobierno pierde el tiempo legislando contra nosotros, Palestine Action continuará con el trabajo de cerrar las fábricas de armas israelíes restantes en Gran Bretaña».
* Kit Klarenberg es un periodista de investigación que explora el papel de los servicios de inteligencia en la configuración de la política y las percepciones. | Twitter: @KitKlarenberg.
Foto de portada: La Intifada Electrónica / VX.
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