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Caitlin Johnstone*
Australia / Viernes 27 de septiembre de 2024
¿Qué tan extraño es que toda nuestra civilización esté estructurada en torno a valores y prioridades tan falsos y ridículos que ingerir una antigua poción psicodélica hace que incluso los directores ejecutivos ricos renuncien a sus trabajos y cambien sus vidas?
El otro día vi un tuit fascinante del CEO de BloomTech, Austen Allred, que despertó muchos pensamientos aquí.
«De los fundadores de Silicon Valley que conozco que se embarcaron en algunos de los viajes psicodélicos de autodescubrimiento, casi el 100% renunció a sus trabajos como CEO en un año», dijo Allred, y agregó: «Podrían ser anécdotas aleatorias, pero ten cuidado con esas cosas».
Allred tuiteó esto en respuesta a la escritora Ashlee Vance que compartió que un capitalista de riesgo le había dicho: «Hemos perdido a varios fundadores realmente buenos por la ayahuasca. Regresaron y ya no les importó mucho».
Hay información muy útil en esas palabras. Revelan mucho sobre el desorden insano en el que se encuentra nuestra especie en el mundo actual y proporcionan información sobre cómo podríamos encontrar la salida.
Of the Silicon Valley founders I know who went on some of the psychedelic self-discovery trips, almost 100% quit their jobs as CEO within a year.
Could be random anecdotes, but be careful with that stuff. https://t.co/cxWJcaiPzD
— Austen Allred (@Austen) September 23, 2024
Quiero decir, piénsalo. ¿Qué tan extraño es que toda nuestra civilización esté estructurada en torno a valores y prioridades tan falsos y ridículos que ingerir una antigua poción psicodélica hace que incluso los directores ejecutivos ricos renuncien a sus trabajos y cambien sus vidas?
Todo lo que se necesita es un ligero cambio en la conciencia, un pequeño cambio de perspectiva, e inmediatamente se ve que toda esta carrera de ratas de dominación y adquisición y productividad y acumulación de riqueza que todos nuestros sistemas políticos y económicos tienen como premisa fundamental es completamente destructiva para la felicidad y la prosperidad humana.
Sin embargo, no es sorprendente que esto esté sucediendo. Las personas logran sus objetivos y se vuelven inmensamente ricas, y comienzan a preguntarse por qué siguen siendo infelices. Buscan un poco y terminan tomando ayahuasca en Perú, y luego ven cómo todos los mecanismos psicológicos que los llevaron a ascender en la escalera corporativa se desmoronan ante sus propios ojos.
Por supuesto, los directores ejecutivos ahora se advierten unos a otros que «tengan cuidado con esas cosas»; representa una amenaza existencial directa para su CEOness.
Los psicodélicos son útiles no por las alucinaciones que proporcionan, sino por las alucinaciones que disipan. De hecho, hay que ser un enfermo mental para lograr lo que nuestra sociedad profundamente enferma define como «éxito». Tu cabeza tiene que estar llena de un montón de fantasías y narrativas ficticias que no tienen ninguna base en la realidad material. Tienes que tener un agujero en ti mismo que no pueda llenarse con ninguna cantidad de riqueza o poder o jets privados o islas privadas. Eso es lo único que puede impulsarte a estar por encima de todas las personas que necesitas pisar para volverte obscenamente rico. Y esas son las alucinaciones que un buen alucinógeno puede sacarte del cráneo.
No es necesario viajar a la selva amazónica para liberarse de la locura de esta civilización capitalista. Ni siquiera es necesario tomar psicodélicos. Todo lo que se necesita es un autoexamen riguroso y trabajo interior, y un deseo ardiente de percibir la vida como realmente es. Cuestiona devota y sinceramente todas tus creencias sobre la realidad, hasta tus suposiciones más básicas sobre la naturaleza de los aspectos fundamentales de tu experiencia, como la existencia, el yo, el otro, la percepción, el pensamiento y la conciencia. Encuentra esas heridas emocionales abiertas y mecanismos de afrontamiento desadaptativos dentro de ti mismo, y con honestidad intransigente tráelos a la conciencia para que sean sanados.
Haz esto y la claridad interior se vuelve inevitable. Los frutos inevitables de una mirada profunda y sincera hacen que sea imposible mantener la voluntad de hacer todas las puñaladas por la espalda y el corte de garganta necesarios para obtener los próximos mil millones de dólares, pero te darán la paz y el bienestar que realmente estás buscando debajo de ese falso deseo. Llenarán ese vacío que estabas tratando de llenar con riqueza y logros y la perversa definición de éxito de nuestra sociedad. Te permitirán tener verdadera felicidad, no por algo que hayas logrado, obtenido o ganado de tus competidores imaginarios, sino porque existes, y porque este mundo es insondablemente hermoso.
Eso es todo lo que realmente estamos buscando. Eso es lo que la gente realmente busca cuando dedica sus vidas a convertirse en millonarios y luego en multimillonarios y luego en billonarios. Todos queremos paz interior y felicidad, que podemos tener si hacemos lo necesario para disipar las alucinaciones que nos impiden darnos cuenta de que ya está aquí.
* Mi trabajo está totalmente financiado por los lectores, así que, si te ha gustado este artículo, si quieres aquí tienes algunas opciones para echar algo de dinero en mi bote de las propinas. Todas las obras son coautoría con mi marido Tim Foley.
Imagen de portada: Video Caitlin Johnstone.
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